Desde muy joven y a partir de vender aspiradores y enceradoras a domicilio, “currelo” (*) tela de difícil, donde en los años 1965, quitando Organismos y Casas de Familias Nobles y Señoriales, era bastante raro encontrar una casa en Sevilla, con alfombras para limpiar o un suelo de madera para encerar. A pesar de lo dificultoso era un “currelante” que sentía verdadera fascinación por lo complicado.

(*) El dialecto de Sevilla que siempre se ha usado aquí para hablar, aunque los catalanes nos quieren hacer ver que el suyo es un idioma. Ejemplo: En Sevilla siempre se ha dicho en relación al trabajo que era el “currelo” y los trabajadores, “currelantes”. La Academia dice CURRO y CURRANTE, lo que aquí siempre se ha utilizado como engaño, trampa, ojana, timo, etc y el currante el que lo efectuaba.

Con varios años de dedicación y multitud de vicisitudes había conseguido una buena cartera de clientes: Sevillana, Abengoa, IBM, Rank Xeros, Crédito y Caución, Organismos Oficiales, Entidades Aseguradoras y de Crédito, Fábricas, etc.
Aplicando la experiencia y con aspiraciones mucho mas importantes me metí entre ceja y ceja, el conseguir convertirme en una de las empresas mas punteras dentro del gremio de la limpieza.

Mi obsesión era conseguir la limpieza en la sanidad y la banca, donde empiezo por hacer un estudio sobre Ambulatorios, Puericultura, Psiquiátrico y el mas serio sobre el entonces llamado INSALUD, para intentar contratar la Ciudad Sanitaria Virgen del Rocío.

Comienzo por los Ambulatorios en los que había un monopolio con una Empresa CREVASOL, propiedad de un antiguo funcionario de las Mutualidades Laborales, (LSVZQZLM) - a partir de ahora utilizaré solo consonantes o motes para referirme a estos personajes - que el tío había conseguido que ninguno de ellos salieran a concurso, incluso siendo obligatorio por su cuantía de mantenimiento y se daba el caso de que muchos de ellos ya los tenía adjudicados a pesar de estar en obras y sin acabar. Esta empresa también estuvo limpiando la Ciudad Sanitaria.

Al final entraron Los Gorilas que detallo más adelante y que se llevaron mas de una decena de años allí.





Buscándome enemigos en el Organismo y a base de tesón y escritos de denuncia,- ni te escuchaban cuando lo exigías -, conseguí que saliesen a concurso y empezamos el resto de las empresas a ser adjudicatarios de los ambulatorios.

En la adjudicación de Puericultura en la c/ Luis Montoto, conseguí el mantenimiento, pero me costó el pagar el peaje mensual a MNLVRA, secretario del Edificio y pariente de un renombrado torero de Sevilla PCCMN, que le tenía que adelantar el dinero si no no cobraba.

Mantuve una entrevista con él, planteándole que íbamos a suspender la situación dado la poca rentabilidad que ofrecía el cliente descontando el pago del fielato suyo. Las consecuencias no se hicieron esperar me empezaron a atrasar los pagos (se llegó a las SIETE MENSUALIDADES sin cobrar) pueden suponer el quebranto económico y los problemas con el personal de mi plantilla, y que me supuso al final tener que rescindir el contrato.

Dado el volumen que iba tomando y la proporción de la plantilla, me encontré con bastantes delegados sindicales mayoritariamente de UGT, (al tema de los sindicatos, le dedico un capítulo especial, ¡¡ pa`llorá !!) y dado mis exigencias en cuanto a los permisos de los liberados y las horas sindicales sobre las cuales siempre se excedían; unido a ciertas dificultades de crecimiento, al final me plantearon la primera huelga a una empresa de limpieza en Sevilla.

Este asunto me hizo estudiar muy a fondo el único decreto de huelga que hay hasta la fecha desde 1977 y hacerme un verdadero experto.

En distintas reuniones con los comité de UGT, les propongo descontar en nómina la cuota de sus afiliados, pensamiento malicioso por mi parte y que fue la que entre otras causa provocó la expulsión del Secretario de Oficios Varios, LSGLMY (El niño) del Sindicato.

Lo hice con la condición de que se ingresase mensualmente por mi parte, el dinero en cuenta habilitada y abierta por LSGLMY en el Bco. Central de la c/ Reyes Católicos, donde también existía otra cuenta a nombre del Sindicato y donde yo gozaba de personal de suficiente confianza.

Naturalmente todos los meses se ingresaba los importes retenidos en nómina para la UGT, pero ¡¡oh sorpresa!! en la cta. personal del Niño para que el hiciese la transferencia al Sindicato como lo estimara. Al final picó (dulce venganza) y lo transferido no coincidía con lo ingresado, situación que se puso en conocimiento del Secretario General de UGT, en c/ Pérez Galdós a MNLFRNNDZ (hoy Presidente de la Autoridad Portuaria de Sevilla) que junto con los quebraderos de cabeza que ocasionaba esta prenda, acabó con su expulsión de la UGT.


Capítulo Segundo
Los tentáculos de la Mafia “B” hasta en el Manicomio