Realizado el trámite verificamos que el modelo que me habían exigido en el concurso de Sevilla, no figuraba en la documentación entregada en este hospital, para un concurso de la misma naturaleza. Con lo cual difícilmente me podían exigir la redacción de la Oferta Económica en un modelo que ellos no entregaban. Al mismo tiempo pido al notario que envíe al Oficial de la Notaría y dé fe de la integridad de los textos que existían en el Tablón, donde tenía que pronunciarse la Mesa de Adjudicación.


Después de un cruce de escritos, la Mesa decide declarar el Concurso desierto.


Naturalmente se ven obligados a sacar de nuevo a Concurso la CSVdeRocio.


Esta vez y con todos los trámites “legales”, pero haciendo una rebaja importante en la oferta económica, nuevamente me adjudican el Concurso.


Entre tanto los Gorilas, con el asesoramiento de El Tato, (el hombre seguía jugando con dos barajas marcadas) y el Sindicato presentan SIETE Recursos de Alzada, 4 los Gorilas y 3 el Sindicato.


El pronunciamiento de la Mesa se tenía que publicar en 10 días naturales en el Tablón de Anuncios de García Morato. Durante los 10 días estipulados y 4 más, asiste el empleado de la notaría contratada por mí, diariamente a tomar nota de lo publicado en el tablón.


¡BINGO!, transcurridos CATORCE DÍAS, aparece un oficio de la Administración de García Morato, firmado por su Director Manuel Gil Chamizo, naturalmente con fecha dentro de plazo, aunque habían transcurridos CUATRO MAS en la publicación, declarando la presentación de los recursos a la espera de su resolución y nuevamente paralizada la adjudicación a Novalim, S.A.


Sorpresa del Director cuando me recibe y le llevo los Actas del Notario de Huelva y Sevilla, diciéndole ademas que de allí me iría al Juzgado de Guardia. Me ruega que le de unos días para hablar con el Director del INSALUD D. Santiago Haya Prat. Reconociendo las muchas irregularidades que venía soportando.


Resultado inmediato a pesar de los acontecimientos y la gravedad del asunto, la adjudicación no se resuelve y siguen limpiando y cobrando los Gorilas.

Capítulo Quinto