Efectivamente al reunirlos les contó ciento y una mentira y lo que les pidió eran que se afiliaran a CC.OO, que todo se arreglaría a partir de eso.

Paulatinamente se van incorporando los huelguistas, sin haber conseguido nada sobre la causa de la huelga. Aunque yo mantuve los despedidos.

Desaparece por fin el sindicato del Niño (no sé si apuntarme el tanto de ser el primer empresario que cerró un sindicato) y queda herido de muerte el Sindicato Andaluz.

Aprovechando la experiencia conseguida y dado que se iba a inaugurar el nuevo Hospital del Valme, le hago a la nueva dirección sanitaria un ofrecimiento:

Retirar de la plantilla de la Ciudad Sanitaria 175 empleados y supervisores con experiencia, respetando categoría, antigüedad y derechos adquiridos sobrantes, porque según ya había demostrado, con mi sistema de tiempo y métodos en limpieza, e inscribirlos como plantilla fija para la limpieza del Valme. Lo anterior suponía ahorrarle a la Seg. Soc. (quiero decir a todos los andaluces) 22.961.250.-ptas al año.

Naturalmente por miedo a los Sindicatos, intervención de mis “socios” que les trastocaban planes inmediatos y que aparecerían como causantes, ademas de los políticos de la misma cuerda de los Mafiosos, lo rechazaron.

Capítulo Sexto
INTENTO FALLIDO DE LA MAFIA “B”